Además de las relaciones de España con la Unión Europea (UE), el Estado español mantiene una especial vinculación con Iberoamérica. En efecto, los vínculos entre España e Iberoamérica —en especial las relaciones políticas, económicas, sociales, lingüísticas, históricas, culturales, etc.—, condicionan que, además de tratarse del destino principal de la internacionalización de la economía española y de ser España la principal puerta de entrada de Iberoamérica en Europa, los socios europeos demandan un papel activo como puente o intermediario para sus actuaciones, siendo España un baluarte muy importante para esta relación intercontinental. Manifestación institucional de esta estrecha relación es la constante participación, al más alto nivel, de España en las Cumbres Iberoamericanas.
También España mantiene un vínculo especial con el Magreb, siendo éste objeto de una atención creciente por la política exterior española. Factores como la proximidad geográfica, los vínculos históricos y los intensos intercambios humanos, económicos y culturales impulsan esta relación con este territorio. Ello se plasma, fundamentalmente, en la «Unión por el Mediterráneo (UpM)», fundada en 2008, con el objetivo de la «integración», «estabilidad» y «desarrollo humano». La UpM está integrada por todos los Estados miembros de la UE (de las que España forma parte), así como Estados del norte de África y de Oriente Medio del ámbito mediterráneo, incluyendo también al Estado de Israel. La Secretaría de la Unión por el Mediterráneo tiene su sede en Barcelona.
Por último, la presencia global de los Estados Unidos, con su papel económico y geoestratégico dominante en el mundo, aunque cada vez también con una mayor presencia de China en este papel, condicionan las relaciones del Estado español con este país. No debemos olvidar tampoco la importancia de los lazos históricos que contribuyeron a la formación de dicho país, como, por ejemplo, el asentamiento español en varias ciudades históricas (San Antonio de Texas, Nueva Orleans, Los Ángeles, San Diego, San Francisco, etc.). En suma, la comunidad hispanohablante en la actualidad en Estados Unidos asciende a más de 57 millones, más que la población española.
A continuación, podemos observar el mapa de hablantes de español en el mundo, referido al año 2015.
