La capacidad que tiene la Geografía para explicar la realidad del mundo actual la convierte en una disciplina esencial para afrontar los retos del siglo XXI como el cambio climático, el desarrollo humano, la geopolítica, los recursos naturales, situaciones sanitarias de epidemia, pandemias, etc. La componente espacial, saber dónde ocurre, es clave para analizar cualquier tipo de fenómeno. Por eso, estudiar la localización geográfica es fundamental para describir y comprender nuestro territorio.
¿Qué es la orientación y cómo se relaciona con la localización?
Antes de profundizar en el concepto de localización es importante aclarar en qué consiste la orientación espacial y cómo se relaciona con la localización geográfica.
La orientación
La orientación espacial posibilita moverse y situarse en el espacio.
La rosa de los vientos, también denominada, rosa náutica, es un símbolo circular que muestra la orientación de los puntos cardinales y sus puntos intermedios. Se utiliza en las cartas de navegación para representar la circunferencia del horizonte. Se atribuye su invención al mallorquín Ramón Llull.

Aunque la orientación es una cualidad intrínseca a los seres vivos, la tecnología ha permitido al ser humano mejorar su capacidad de orientación, siendo la brújula un excelente ejemplo de ello. Inventada en China en el siglo IX, la brújula, compuesta por una aguja imantada que siempre señala al norte magnético terrestre, posibilitó al ser humano, entre otras muchas cosas, navegar en el mar abierto.
¿Cómo se utiliza una brújula? Te proponemos el siguiente recurso interactivo de Descubre el territorio: la brújula, para que de forma lúdica y a través de pequeños retos aprendamos a manejar este instrumento básico para la orientación geográfica.
La localización
La localización se define como la situación que un objeto o persona tiene en un lugar determinado.
A modo de ejemplo, en el siguiente mapa interactivo se muestra la localización de los Paradores de Turismo.
El espacio, desde un punto de vista territorial, es objeto de estudio preferente de la Geografía. La localización geográfica será, por lo tanto, cualquier forma de ubicación en un contexto geográfico. Sin embargo, la Geografía, como disciplina científica, no sólo se dedica a localizar puntos sobre la superficie terrestre, también relaciona esos puntos con los fenómenos económicos, sociales, culturales y físicos que suceden en un determinado espacio.
Para comprender la localización de la actividad humana en el territorio resulta imprescindible analizar los denominados «factores de localización», es decir, las circunstancias de su ubicación, las razones de su emplazamiento (lugar físico que ocupa). Para una industria, por ejemplo, su emplazamiento dependerá de factores de localización como la proximidad a las materias primas, la accesibilidad a las principales vías de comunicación, la proximidad a la demanda, etc. Por su parte, el desarrollo de un destino turístico litoral dependerá de factores de localización como las condiciones climáticas, las características del mar o la existencia de infraestructura turística de acogida.
A continuación, se muestran los establecimientos certificados con Q de calidad turística. Observamos cómo se distribuyen y el tipo de establecimiento del que se trata.
El desarrollo de los Sistemas de Posicionamiento Global (más conocido como GPS, por sus siglas en inglés de Global Positioning System) y de los Sistemas de Información Geográfica (SIG o GIS en inglés) han acercado la localización geográfica a la sociedad. Para saber más, accede al apartado «Recursos digitales para la localización».
La información geográfica participativa permite conocer la realidad de cualquier parte del mundo a través de la contribución de cualquier usuario de dichas tecnologías.